Bar Restaurante Victorino

Bastante buen ratio precio/​calidad, tienen variedad de sándwiches, chorrillanas y otros platos, la carta de bebestibles también bastante amplia. Siempre voy por el postre de chocolate con helado de menta, exquisito!

Fuimos a celebrar una despedida a este lugar… Estuvimos en el segundo piso donde apenas hay 4 mesas, por lo que estar arriba no nos permitio una atencion rapida, de hecho pedimos unos sandwichs que estaban bastante ricos pero al pedirles aderezos, se demoraron una eternidad y termine comiendomelo asi no mas.
En cuanto a la calidad de los sandwichs, yo probe la hamburguesa con cebolla caramelizada, con tomate y papas hilos… La cual estaba rica y bien sabrosa pero le faltaba un poco de frescura, asi como palta o lechuga. Tb probe el sandwich de mechada que era muy rico, al igual que el chanchito a la mostaza.
En cuanto a los precios son bastantes accesible y no cuestan mas de $ 5.500.
La verdad es que estaba bueno pero no se si volveria a repetirme el plato

Nos habíamos quedado con las ganas de ir desde el viaje anterior, donde nunca conseguíamos mesas. Volvimos a tener problemas pero logramos conseguir. La trilogía de sanguiches es ideal para compartir sin salir rodando. La limonada con menta y jengibre es muy rica también.
Lo único malo es que la atención fue un poco lenta, y bastante seco el mozo, pero uno nunca sabe, tal vez estaba laburando hace 12 horas. Igual no fue maleducado ni nada.

Es un bar en la calle Lastarria, en barrio del mismo nombre, que vendría a ser como un palermo soho/​serrano nuestro.
Nos sentamos en la vereda, y pedimos unas cervezas artesanales, muy ricas, una chilena y otra alemana. Tenían variedad de estilos y marcas (stout, lager, golden) y el precio ni caro ni barato: aprox 50 pesos la botellita. Para acompañar pedimos unas papas, nos dijeron que venían con carne o con verduras. Como mi compañera es vegetariana, pedimos la segunda opción, y la verdad q no defraudó. Papa bañadas con quesos y salteado de verduras (morrón, cebolla, champiñones) muy deliciosas!!!

Buena atención, rica comida y buena atención. Abre los Domingos. Baños muy limpios. Pedí una chorrillana mixta. Lo único que de suponía que venía con mucho mariscos pero apenas y encontré el pulpo y los camarones. De todas formas estaba exquisita la comida.

Due to a law in Santiago, you have to order food with your drink. The atmosphere is dark and plain, service is terrible, as is the food. Don’t waste your money or time.

Hace un par de años era lo mejor de la zona. Desde el 2013 con la nueva administración lo que pidas es de regular calidad. Los tragos desabridos, la comida pobre. Todo mal!

Victorino, lugar lindo, buena comida, buenos precios, y ya una tradición.
Fuimos a comer hace un par de noches, y es siempre un agrado. El buffet se agradece, la carta de vinos, y la oferta de comida es siempre amplia, puedes encontrar un rico picoteo, un sabroso trozo de carne o simplemente, la lista de vegetales es interminable.
Yo no ocupo la terraza, no la recomiendo porque la vereda es muy angosta y siempre hay público transitando, es por lo que te recomiendo que vayas directo a su salón, es un agrado, en verdad lo es. Me gusta porque es tan acogedor que podrías estar mucho tiempo ahí, me ha pasado siempre, y siempre termino cerrando el local.
Sabemos que la oferta en el barrio Lastarria ha crecido, pero Victorino es un clásico a esta altura, por favor, no dejes de ir, pasarás un super rato, no se arrepentirá.

Victorino es un restaurante con historia en los Barrios Bellas Artes y Lastarria, lleva más de 10 años ubicado en calle Lastarria, una especia de casona vieja restaurada que ofrece una amplia gama de ofertas, desde picoteos y sánguches, hasta platos de fondo y un buffet de ensaladas.
Es un lugar idea para ir a almorzar y cortar la jornada laboral en su terraza Ofrecen muchas alternativas vegetarianas y livianas, entre las cuales destaca la ensalada Grano Madre, de quínoa con palta, tomates y queso de cabra, sin dejar de lado platos más contundentes como el Bife a lo Bruto y el Lomo 4 Quesos. Dispone de una barra amplia donde se pueden encontrar muchos licores y vinos, cervezas y tragos preparados.
Para el picoteo, los pimientos del piquillo acompañados de una rica cerveza, están de lujo!
También es un lugar ideal a donde ir a cenar con amigos o con una pareja antes de ir a bailar, dado que está ubicado en un sector muy turístico y cultural se puede llegar a un buen club con tan solo 5 minutos de caminata.

Hace ya un par de años unas amigas me invitaron al Victorino. Es la única vez que he ido, pero lo menciono acá porque probé un plato que sólo comí ahí y que nunca más vi. De hecho ni siquiera sé si aún está en la carta, se trata de el conejo en escabeche, que de verdad era maravilloso. Yo no soy mucho de comer animalitos exóticos (entendiendo por exótico algo diferente del pollo y la vaca), pero ya que me invitaban me animé a probarlo: es delicioso, de verdad riquísimo.
Así es que si va, pregunte si aún lo tienen en la carta, y si fuese así anímese a probarlo… de verdad que no se arrepentirá!

Cuando de hambre se trata en el Barrio Lastarria definitivamente Victorino la lleva, es un lugar ideal para tomar platos contundentes que jamás podrán ir de la mano con nuestra dieta.
Sus comedores como la terraza están súper bien para pasar rato junto a nuestros amigos en un lugar bohemio y misterioso. Sus platos son característicos por tener una comida local que se nutre de una nueva cocina internacional novedosa, dentro de estos suculentos platos está el lomo 4 quesos acompañado de papas fritas que junto a una fresca cervezas definitivamente terminan por hacerte la tarde.
Otra particularidad de este restaurante es su horario, cuando todas las luces se apagan en el barrio les puedo asegurar que Victorino seguirá con las velas prendida alojando a los más noctámbulos