Como parte de la cadena de helados vas a encontrarte con el mismo menú que en cualquier otro Cremolatti. Como siempre me gusta destacar en las heladerías los postres o copas heladas. En este caso, los panqueques que son obscenos. Tienen muy buen precio y hay 5 variedades para elegir. Lo que es cafetería no hay mucho para destacar. Los precios son razonables pero el sabor es más de lo mismo. Lo lindo es la ambientación, con asientos al aire libre y en la parte de atrás al lado del río, debajo de una linda arbolada tenes sombra para sentarte y degustar unos ricos postres.
Martín H.
Classificação do local: 4 Córdoba, Argentina
Uno de los mejores lugares para desayunar o merendar de la Ciudad. Sin dudas tiene una gran vista. Los precios son altos. Sin vueltas. Si estas de vacaciones(o no en el día a día) es un buen sitio para charlas o cenas. La atención es impecable por parte de los chicos, lo que hace darte ganas de volver(sumado a las cosas ricas que hay!). Recomendado para visitar en un punto estratégico de la city y a la vez lo suficientemente apartado del caos de la capital.
Aurora p.
Classificação do local: 5 Long Beach, CA
The ice cream here was delicious compared to most of what I’ve had here in the U.S. Always a great place to stop by and grab a treat or a cool beverage at. My Spanish is terrible and the employees were still so polite and kind.
Belen P.
Classificação do local: 3 Villa Allende, Argentina
Fue todo un hito para la ciudad de Villa allende cuando se abrió una sucursal de Graciela F en este lugar que por alguna razón dejó de funcionar y se vino Cremolatti. No ha habido mucho cambio en la fachada de un local a otro pero si volvió a ser concurrida esta esquina con esta nueva propuesta en cafetería y pasteleria y cremosos helados. Lo que le falta es un lugar con sombra. Tiene unos quinchitos afuera pero igual te moris de calor si es que quieres disfrutar de una tarde afuera. Habilitaron una mesitas detrás del local, a la sombra de la construcción pero no está del todo copado. Lo bueno es que pusieron un castillo inflable para que los adultos disfrutemos de un buen desayuno o merienda o helado mientras los chicos hacen de las suyas a sus anchas. Lo demás es lo mismo que cualquier Cremolatti: dulce, rico y apetitoso.