Isabella

A las corridas como siempre, necesitaba un regalo para mi sobrina, volviendo de trabajar paso todos los días por calle Arijón y es una zona comercial donde hay variedad de negocios que po0dés conseguir cualquier cosa que desees, como yo no tenía mucha idea de que poder regalarle, me estacione a la altura del 1500 y vi un local muy lindo que me llamó la atención su vidriera por las cosas lindas que tenía, ideal para mi sobrina que es una chica joven y moderna. Entré y pregunté por una cartera muy linda que estaba en vidriera, la empleada muy amablemente me mostró y me explicó del material con que estaba confeccionada que era de un cuero sintético de excelente calidad, me gustó muchísimo y más me gustó la atención recibida. Sus precios son accesibles, la aboné de contado pero me ofreció pagarla con tarjeta de crédito que no me pareció porque no era un precio tan elevado.
Entre las cosas bonitas que venden hay unos pañuelos con unos estampados muy coloridos, para toda época del año, unos bolsos de todos los tamaños y texturas, y ni hablar de la bijouterie que trabajan que es sumamente moderna y con estilo. Realmente lo recomiendo, me salvó de recorrer varios locales!

Rosario tiene varias calles en las que se forman verdaderos centros comerciales, negocios uno al lado del otro, de manera tal que muy cerca de tu casa podés encontrar lo que busqués, sin necesidad de moverte hasta el centro. Arijón más o menos desde la altura del 1400 hasta el 1900 constituye uno de esos centros. Como siempre, en cada zona de este estilo, hay algunos locales que me tientan mucho y en los que termino comprando si paso.
Isabella es uno de ellos, imposible no estar esperando el 138 y no mirar la vidriera, más imposible aún es no querer comprarte algo. Tienen todo tipo de accesorios (carteras, pañuelos, aritos y collares). Algunos me parece que son más para señoras, pero mirando la vidriera, siempre encontrás algo que te mira y te dice «llevame».
Yo me compré unos aritos muy bonitos, un pañuelo (que cuando llegue a casa mi mamá halago tanto, que no sé qué me agarró que se lo regalé) y una cartera negra clásica. Los precios son normales, al menos para ser un negocio que no está en pleno centro.