The Breacan

The Breacan destaca la cocina tradicional británica, con pasteles de carne, y también tiene noches temáticas de comida internacional que vale la pena probar (la thai, por ejemplo, es buenísima).
El ambiente es cómodo, ideal tanto para ir en un grupo de amigos como para ir en pareja. La atención es esmerada y el personal está informado sobre la composición de los platos, algo importante para quienes gustamos de saber algo más sobre la elaboración.
Las porciones tienen el tamaño justo para satisfacer y hacer que lleguemos al postre.
Recomiendo el pastel Cambray y la cerveza que siempre llega a la temperatura justa.

Uno de los lugares más copados para comer en toda la ciudad, sin duda alguna. Los platos –bien british– son absolutamente deliciosos y uno los paga con los ojos cerrados, sin importar cuánto salgan. Además, la atención es tan buena que derriba el mito ese de la flema británica. Son súper atentos y le ponen toda la onda para contarte todo sobre la elaboración de los platos y hasta por ahí se arriesgan con alguna anécdota que adorne la lista de ingredientes. Tanto los platos de mar como los más clásicos son excelentes, además de que están presentados de manera muy elegante y original. Son los típicos platos a los que les sacarías varias fotos antes de siquiera tocarlos. Las bebidas no se quedan atrás y también uno tiene la posibilidad de acompañar la comida con cervezas de la mejor calidad o auténtico whisky escocés (como el chef). Está en pleno General Paz, un barrio que de por sí tiene muy buenos pubs y restaurantes. Si uno quiere invitar a una primera cita o a una cena aniversario, es el lugar indicado por el clima distendido pero con onda. Y si uno quiere regalarse una noche de disfrute gastronómico a solas, también.

Es por lejos el mejor lugar para ir a comer en la ciudad. Recuerdo la primera vez que fui, en su viejo local frente al Palacio Ferreyra y Plaza España. El lugar era sencillo pero los platos mágicos, me pedí unos mariscos que eran una locura, encima los menús te traen entrada y postre y está todo buenísimo, es increíble, con el tiempo mejora, y cada vez pareciera que le salen las cosas más ricas.
Ahora, ya hace un tiempo, están en Barrio General Paz. No me queda tan cómodo como antes pero siempre que puedo trato de ir, porque encima el negocio es atendido por los dueños, y el chef, un escoces que de a poco habla mejor el español, son muy piolas y buena onda, te explican que es cada plato, se acercan a ver si te falta algo, te atienden súper bien.
Recuerdo una de las últimas veces que fui se estaba festejando un cumpleaños escoces, en una parte del salón que se cierran las puertas y queda como aparte, como un mini salón. Desde aquel día que quiero hacer mi festejo de cumpleaños a la escocesa y comer comidas típicas y obvio acompañar todo con whisky!

La mayoría de los restaurantes del barrio General Paz tienen buena reputación ya que la zona se convirtió en uno de los polos gastronómicos de la ciudad de Córdoba. The Breacan, sin lugar a dudas, cumple con las expectativas que genera.
En el lugar se sirve comida internacional con una importante influencia británica. La atención es muy buena y los precios, si bien alto en comparación a otros lugares, es totalmente acorde a los platos y los productos que se recibe.
Uno de los puntos fuertes del restaurante es que es uno de los pocos que está abierto el domingo al mediodía, así que es ideal para todos aquellos que se guardaron el sábado a la noche y quieren comer bien. Un detalle, el menú es especial para estos días.
The Breacan ofrece un menú de mediodía con plato principal, bebida y café (que se puede cambiar por un postre por diez pesos más) a entre 70 y 80 pesos. Además, algunos días de la semana realizan un «Cheap & Chic», en el que se ofrece una comida de tres pasos a 100 pesos, con el detalle de que se debe abonar en efectivo.
El baño de mujeres cuenta con un amplio cambiador para bebés.

Mi restaurant favorito en córdoba sin dudas. Está en una casa vieja y enorme de techos altísimos en barrio General Paz, decorada preciosamente y con varios ambientes bien separados (incluso en el entrepiso hay una mesa gigante para festejos o grupos grandes)
El chef es escocés, así que la carta tiende hacia lo que (al menos en mi imaginación) es la cocina británica tradicional, mucha carne de caza, estofados, pesca, aunque también, obviamente, hay platos más modernos y «globales», siempre me pareció más interesante volcarme hacia lo más representativo del lugar y ésto es la cocina originaria del chef.
Una cosa que, sin dudas, inclina la balanza siempre hacia el Breacan al momento de elegir donde ir a cenar, es la atención. SIEMPRE me atendieron perfectamente y estuvieron atentos a mis necesidades. El Chef no tiene dramas en acercarse a tu mesa si querés preguntarle alguna boludez y las mozas son muy atentas. Destaco ésto porque, en Córdoba todavía estamos un poco en la época de las cavernas y muchos restoranteros se sienten la segunda venida de Ferrán Adriá y, además de cobrarte como si estuvieras comiendo en la luna, te tratan como si les debieras guita, eligen mozas más preocupadas por posar que por aprenderse la carta, etc. Así que es un gran SI que The Breacan sea un cambio en este aspecto.
Como extra (y aunque nunca lo encontré abierto) en un semi-​subsuelo que da a la calle, funciona The Cellar, un bar escocés de tragos que, al menos en los papeles, es ideal para after offices y tal.