Antares

Un buen lugar para ir con amigos a cenar o después a tomar algo. Buena atención, rápida y amable. Buena cerveza. Ofrece varios menús de comida, entre picadas o platos individuales. Lo que más se destaca son las papas antares que hay que pedirse si o si! En cuánto a postres hay varias opciones también muy tentadoras como el volcán de chocolate, entre otras. El precio es relativamente normal, al ser varias cosas para compartir sale más barato. Muy recomendable

Salía de ver a Pearl Jam y venía pensando en cerveza!
Llegamos rápido (tipo 1.15am), luego de que el recital terminara como a las 12.20am.
Antares estaba lleno, pero quedaba algún lugar en la barra de afuera, donde la temperatura ideal y la música eran el prólogo de una gran velada.
Nos trajeron las cartas y pedimos nuestra cerveza, que al final fue la del día, que era una suerte de IPA y rubia juntas, muy rica y a 2×1 excelente!
Cuando llegó el momento de pedir la comida, la respuesta fue que la cocina había cerrado hace 15 minutos y no nos podían servir nada. En serio? No pensás que la gente bajonea??? Que hay que comer algo para bajar con la cerveza ???
Bueh, nos llenamos un poco de maní y nos fuimos a probar suerte al McD :-(con la panza un poco más llena de cerveza de lo que deberíamos a esa hora y después de no haber comido por muchas horas

Desde el momento que arribamos al restaurante, nos hemos encontrado con una pésima recepción de parte del staff que realiza dicha tarea.
Además de la demora de aproximadamente 40 minutos, nos ofrecieron una mesa afuera y tuvimos que procurarnos las sillas nosotros mismos.
Una vez sentados, si bien el mozo se presentó rápido y nos tomo el pedido, la cerveza no era de otro mundo. El Campari tenía todo menos Campari, parecía un jugo de naranja.
Los platos en su versión small en comparación con la sucursal de La Plata. Las papas Antares grandes tenían el tamaño de las pequeñas. Las rabas con gusto a aceite viejo.
Había, no sólo un perro, sino DOS!!! Perros que se metían en tu mesa y te robaban la comida! Te ponían el hocico en el plato! O se subían a las mesas a comerse las sobras.
Es lamentable el Antares de City Bell. Pésima relación Precio/​Calidad. Primera y última vez.