6 avaliações para Restaurante del Centro Asturiano
Não exige registro
Mili C.
Classificação do local: 5 Buenos Aires, Argentina
Tendría que organizar mi Top 5 de españoles en Buenos Aires, pero este sin dudas está en el podio de los 3 primeros. Mozos de la vieja escuela, de esos que te atienden genial y que saben aconsejarte y guiarte a través de la carta. La realidad es que vine varias veces sin mirar la carta, confiando plenamente en el criterio de los mozos y fue increíble. Recomiendo esta experiencia. Las porciones son enormes y siempre salen bien. Todo bien condimentado, no necesita sal de más, siempre en el punto justo. Soy muy fan de la paella y de las cazuelas que hacen aquí. Esta bueno ir de a muchos y pedir varias cosas(tortilla, picada de mar, ¡experimenten!) Hay sidra española, hay postres ricos, hay de todo para todos con el único objetivo de pasar un buen momento. En horarios pico se llena de gente, pero se puede reservar :)
Agos M.
Classificação do local: 5 Buenos Aires, Argentina
Este lugar es la glora misma. Es EL lugar en la ciudad para comer comida española, para mí. Está ambientado acorde aunque tampoco exagerado, igual eso poco importa cuando los platos son como los hacen acá. Porciones enormes y muy bien elaboradas, muestran un repertorio variado de los típicos platos españoles(y algunos porteños también). Si venís es clave pedir mariscos de algún tipo, ya sea rabas, chipirones a la lyonesa, gambas al ajillo como entrada para compartir o bien un plato de cazuela de mariscos o paella como plato principal. Son realmente imperdibles. También hay tortilla y platos con jamón crudo, como otro tipo de especialidades españolas. De postre para mi es fundamental pedir natillas, otro postre clásico de la comida española y que en el lugar hacen muy bien. El salón es muy amplo y hay mesas grandes, por lo cual está bueno para ir en grupos si se reserva antes(por las dudas). La atención es buena.
Jimena V.
Classificação do local: 5 Buenos Aires, Argentina
Fuimos porque lo elegimos para empezar algo así como una nueva actividad de este grupo de amigos que es la de ir periódicamente a comer a lugares de comidas típicas. Gran comienzo nos dio el Centro Asturiano. Es maravilloso. Todo tan de otro tiempo que nos encantó. No habíamos comido nada y ya estábamos conformes. Entre el espacio y la atención de estos mozos de experiencia, conocedores de lo que están vendiendo y muy amables, nos predispusimos muy bien a iniciar la experiencia. Sin mirar el menú pedimos unas rabas(muy ricas). Luego pedimos una trucha a la asturiana, una picada de mar y una fabada. Daba para aplaudir de pie. La trucha con esa salsa fue única, la picada tenía calamaretis, rabas, pulpo, gambas, mejillones, y algunas cositas más y todo increíble. Yo no soy muy fan del pulpo pero debía probarlo, estaba excelente. La fabada, comida super potente si la hay, exquisita. El detalle de servir pimentón(en latita, hermoso), pimentón dulce y aceite de oliva demuestra que esta gente sabe y por suerte, está entre nosotros. De postre, y a pesar de que estábamos satisfechos, pedimos natilla y tiramisú. No podíamos irnos sin probar la natilla. Lo bien que hicimos. Acompañamos la cena con vino y agua. Si les gusta la comida que les conté o no la probaron en buenos lugares y suponen que no les gusta, vayan. En cuanto al precio, no son productos baratos los que sirven, así que lógicamente eso va a repercutir en la cuenta. Pero no es imposible. Vale la pena.
Mariana K.
Classificação do local: 4 Buenos Aires, Argentina
¿Sos de los que les gusta comer abundante y en un clima familiar? Definitivamente tenés que darte una vuelta por este restaurante ubicado en el tercer piso del Centro Asturiano. Antes solía vivir por este barrio y más de una vez caminando con mis abuelos ellos me contaron cómo venían a bailar al salón del lugar(si bien se conocieron en el centro Gallego, este también era un clásico). Llegás y subís los escalones de la imponente entrada, a tu izquierda vas a ver un cartel de bronce que dice Restaurante tercer piso. Subís y que no te extrañe encontrarte– apenas se abre la puerta– con abuelos muy alegres(sí… muy alegres) comentando lo rica que estaba la comida. El salón del restaurante es enorme con esa decoración típica de los bodegones… no tiene la sofisticación del Vasco Francés pero sí se respira un clima muy familiar. Tienen un reloj con péndulo con la hora de España, mapas de Asturias y algunos cuadros un tanto extraños. Si el lugar está lleno, te hacen esperar sentado en unas mesas y te dan la carta para que chusmees(nosotros fuimos tipo 23.30 hs y no tuvimos que esperar tanto, aunque me imagino que si vas a las 21 debe ser mucho más complicado conseguir una mesa, sin reservar, en especial para los grupos grandes). Además hay sector de espera para los más chicos con mesas y sillitas de colores. Como señalaban en reseñas anteriores los precios no son baratos pero tampoco están desubicados dada la calidad y abundancia de los platos. Nosotros esta vez optamos por probar la picada de mar sugerida en la carta y no defraudó para nada. Las rabas estaban buenísimas… y mi novio se volvió loco con el pulpo(yo le tengo idea, je). La picada viene con una variedad de salsas muy buenas. De postre recomendado el arroz con leche y canela… aunque el panqueque de manzana también tenía una pinta bárbara(lo pidieron los de la mesa de al lado y me tentaron… será la próxima). El ambiente es informal aunque hay que admitir que abunda la tercera edad que disfruta del buen comer y beber(vestida un tanto más formal). Había un poco de ruido ya que estaban festejando un cumpleaños y le daban al golpecito de la copa de manera desenfrenada. Ja. Una experiencia aparte son los mozos. Personajes en extremo. Si pagás en efvo te hacen un 15% de descuento, igual aceptan tarjetas(con vino calculá unos 200 pesos por persona). Creo que me quedo con otros espacios de este estilo pero es innegable que si te gusta la comida española este es un lugar que sí o sí tiene que pasar por tu degustación reseñadora en Unilocal. Cobran servicio de mesa, pero hay que decir que la panera estaba buenísima con mantequitas. Hay wifi pero todas las veces que le pregunte al mozo. me dijo«Ahora pregunto» y nunca me tiró el dato.
Natalia B.
Classificação do local: 4 Buenos Aires, Argentina
El centro asturiano es ese lugar al cual debes dirigirte para comer muuuuy rico. Como la mayoría de los restaurantes españoles, no es barato, pero vale cada centavo. Es un club antiguo, no tiene una deco moderna ni sofisticada, pero hasta eso me gusta de este lugar. Mozos con mucha experiencia que con una sonrisa recomiendan y explican cada plato.
Luciana D.
Classificação do local: 5 Buenos Aires, Argentina
Deberían haber visto mi cara cuando, de curiosa, busqué comentarios sobre el Centro Asturiano y vi que nada habían ingresado. Admito que mi indignación se elevo hasta considerarlo una falta de respeto y no dudé en hacerle honor al famoso restaurant del tercer piso de la calle Solís. Siempre sentí debilidad por la gastronomía ibérica y cuando tengo la posibilidad, me mando sin dudarlo. No puedo contar la cantidad de veces que lo propuse para comer una deliciosa paella, con mariscos frescos y un azafrán único. La cantidad de domingos al mediodía que me di una vuelta tentada por probar las setas al ajillo. Las noches de invierno que fantasee con la mejor fabada que probé en mi vida(un guiso típico de la zona con cerdo, panceta, chorizo, morcilla cantábrica y porotos, claro… fabes es el nombre con el que se denominan allí, porotos le decimos nosotros por«purutu» en quechua). La tentación irresistible de acompañar cualquier comida con una sidra tirada que en nada se parece a la que acostumbrábamos a tomar de niñas en las fiestas de fin de año, mucho más sabrosa y no tan empalagosamente dulce. Reducir el Centro al restaurant es injusto de mi parte, es un lugar de encuentro de toda la comunidad residente en nuestro país donde se realizan jornadas, espectáculos y se celebran aniversarios. Una casa hermosa de principios de siglo pasado, imponente y con espacios para recorrer, como la pequeña terraza, donde huyen los fumadores cuando se levantan satisfechos. Si nunca ha tenido la suerte, adéntrese en los secretos culinarios de Asturias y luego me cuenta, tía.