Ramón Generales

Impresionante lugar para cualquier momento del día! Literalmente es perfecto para desayunos, brunch o almuerzos. El local es pequeño (8 mesas, 3 afuera) y a la vez es bazar para comprar cosas para la casa. El ambiente es muuuuy relajado, con música suave y muy cordial atención. Ahora a lo que importa… La comida. INCREIBLE! Carta acotada pero cada uno de los platos sale con el detalle y cuidado acorde a una carta chica. Sabores que estallan en la boca y una limonada que te hace olvidar el calor agobiante del verano. Si no quedaste satisfecho tenés café Lavazza y postres dulces que te obligan a una siesta en el estado de felicidad más placentero. Visita obligada!

En el principio fue Le Ble quien estirara hasta Chacarita los efluvios palermitanos; ahora también tenemos a Ramón Generales para hacerle compañía. Dualidad en la propuesta: se trata de un café y una tienda de regalos (bazar) en un local muy pequeñito y coqueto sobre Jorge Newbery, con mesas en la vereda si el buen tiempo lo permite. Como emprendimiento que recién arranca la atención corre por parte de los dueños, ergo muy atenta y dedicada. Carta todavía no hay, la oferta es escueta: café Lavazza, limonada (riquísima y refrescante para las tardes de diciembre) y pastelería casera. Los precios son muy amigables, y la música está rigurosamente seleccionada.