Comprar medialunas que salen tibias por la mañana no tiene precio!!! Están cabeza a cabeza con las del botánico! Vale la pena probarlas. Se puede pedir envíos a domicilio. Las empanadas son muy ricas! También lucio ofrece menues diarios que están buenos.
Priscila A.
Classificação do local: 5 Buenos Aires, Argentina
Lucio me parece la mezcla perfecta entre restaurant palermitano y fonda familiar. El cliente habitué más joven seguramente debe rondar los 65 años, al igual que los mozos, que son como los tradicionales de microcentro. Maneja precios descomunalmente accesibles para encontrarse en esa zona y es ideal para huir de las filas y jugos en frascos de aceitunas. Por supuesto que la especialidad son las pastas, caseras y con todo tipo de salsas. Yo cada vez que voy pido siempre lo mismo: el pollo al verdeo con papas españolas, que debido al tamaño del plato y la abundante salsa te puede dejar incapacitado para caminar 2 pasos por aproximadamente media hora, pero vale la pena. Las pizzas son otro golazo de este gran lugar. Ricas, crocantes, la masa tiene un gustito riquisimo y buenos ingredientes en todas. También fui varias veces a merendar: el café es muy rico y recomiendo 100% el lemon pie. Claramente es imprescindible para los que vayan pedir medialunas para llevar si o si, que para mi son las mejores del condado todo.
Doble V.
Classificação do local: 4 Buenos Aires, Argentina
Es de esos lugares que no fallan: pizzas, pastas, risottos, minutas… hasta incluso comida light para quienes nos estamos cuidando(¿). Y si no te vas una tarde a tomar un té o café con las medialunas recién calentitas(sacan continuamente del horno bandejas y bandejas que se venden como pan caliente). A toda hora la atención es sumamente correcta: son mozos que trabajan allí hace años y saben cómo hacer que te sientas bien. Los precios son accesibles: mucho más si compartís algún plato como los de pastas que son abundantes, los cuales definitivamente son mi perdición. Si las pedís acompañadas de una salsa Parisienne, nunca falla. Recomiendo no tirarse encima de los panes que te acercan para comer antes de la comida porque seguramente terminarás dejando luego gran parte del plato. Pero también uno es humano y resulta imposible tentarse hasta con eso. El salón es amplio y siempre me tocó encontrarlo limpio y con seguridad constantemente en la puerta. Y si la fiaca gobernó tu cuerpo, nada mejor que pedir por teléfono y te lo llevan sin problemas. El sector del delivery está justo al lado(detrás de una puerta más pequeña que la del salón). Llega conservando el aroma y el calor. Nada más importante que eso.
Milena C.
Classificação do local: 3 Buenos Aires, Argentina
Nunca hubiese entrado a Lucio. No es el tipo de lugar que me llame la atención. Pero tenía una reunión de trabajo en la zona y quedamos en almorzar ahí. El menú ejecutivo es muy completo: entrada, plato principal, bebida y postre por menos de 80 pesos. El ambiente es del barrio: señoras comiendo, alguna mamá con su hijo en almuerzo previo al segundo turno del colegio, hombres en traje y viejitos con el diario y un café. El lugar es agradable, como está en una esquina es bastante luminoso y amplio. Hay mucho espacio entre mesas y eso te permite estar tranquilo, en la tuya. Estamos hablando de un restaurante de comida italiana, por lo que seguramente se destaquen las pizzas y la pasta. Pero yo pedí menú light. Un lomito al plato con un milhoja de calabaza que estaba muy bueno. Me perdí el postre. Pero estuve a punto de entrarle a una medialuna con un café. ¡Se veían muy tentadoras! Me pareció genial para ir a comer en familia.
Diego P.
Classificação do local: 2 Buenos Aires, Argentina
Este lugar tiene toda la pinta: el nombre italiano, el estilo acogedor, los menúes elaborados del mediodía anunciados en una pizarra en la puerta, todo parece indicar que estamos ante un restaurante que no es ni un bodegón(porque es más elegante) ni tampoco extremadamente fancy palermitano. La especialidad son las pastas, claro. Pero lamentablemente toda esa esperanza se esfuma cuando probamos la comida. Todavía guardo en mi memoria unos tallarines con salsa blanca que parecían un plato de engrudo, las calorías más gratuitas que comí en toda mi vida. Y antes de eso, una milanesa de pollo repleta de cartílagos(eso me destroza). Como afuera muy seguido y suelo preferir estos restaurantes sencillos antes que la cosa muy elaborada, al menos para el mediodía, pero nunca volví a pisar Lucio. Quizás deba agregar que en el fondo hay una pequeña panadera en la que se puede pedir medialunas para llevar. TIENEN buena pinta, pero nunca las probé.