Estación Dorrego Línea B

En la hora pico se complica subir, ya que viene bastante lleno de las estaciones anteriores.
A eso se le suma que los nuevos coches están PESIMAMENTE diseñados, el aire acondicionado no da abasto y son realmente incomodos para la gente.
Es por esto que no puedo darle una buena puntuación, pero no tiene nada que ver la estación sino con el servicio que brindan.
La estación por lo general esta limpia, y hay gente siempre atendiendo las ventanillas.
Con respecto a la decoración/​artística típica de todas las líneas de Subte, en esta está presente pero no hay mucho que destacar.

Las estaciones y las formaciones, en general, de la linea B estan muy dejadas. Deberian, a mi parecer, darles un cambio de look, modernizarlas (como la linea D o la H).
Algunas estaciones estan mas lindas que otras, pero no veo una preocupacion por el mantenimiento.
2 estrellas esta oportunidad.

Estación de subte de la línea b que suele estar llena de gente ya que esta cerca la estación de tren del San Martín, así que cuando es horario de tren rebalsa… En cuanto al estilo se nota claramente que es una estación antigua y si bien fue renovada mantiene ese estilo de las viejas estaciones, con algunos carteles de mármol, y otros pequeños detalles. A mi criterio el subte B es una de las que mejor funcionan en frecuencia por lo cual tampoco estuve mucho para poder mirar con mayor detenimiento los detalles de toda la estación. En breve volveré y actualizare reseña jaja

La estación Dorrego está en Chacarita, pero a una cuadra de donde está el límite con Villa Crespo (y a menos de diez cuadras de Palermo, ya que estamos). A pesar de que fue renovada hace poco, es difícil ocultar su edad comparada a las más nuevas como De Los Incas o la del Abasto, Carlos Gardel.
Se llena más que nada con aquellos que hacen combinación en la estación anterior, Lacroze, saliendo del ferrocarril Mitre, y en Dorrego mismo con los que salen de la estación Chacarita de la línea San Martín. A veces esto puede entorpecer la pasada de la SUBE por la súbita cantidad de pasajeros y costarte un subte, pero como la frecuencia no es tan tremenda no hace más que una diferencia de cinco minutos que tal vez te asegura viajar un poquito mejor.
El tren suele llegar lleno, incluso por la tarde, pero no es tan insufrible como en el microcentro. La estación en sí no está tan dejada, pero la verdad es que la pobre a veces parece que no puede más. Tiene una escalera mecánica que a veces funciona, pero cuando no lo hace le complica la existencia a más de uno que viene cargado, cansado, o con un estómago lleno de maravillas bien Unilocaler.
Una renovación de la zona pre-​andenes y más accesos serían ideales. Que haya dejado de funcionar la B varios meses los domingos y no haya habido cambios más drásticos fue un poquito decepcionante.

Esta estación está ubicada después de Federico Lacroze o Chacarita en la Linea B yendo para el centro. He bajado muchas veces en esta estación porque durante años tome ahí el 78 o 176 para ir a mi casa. Esta estación cuenta con escalera mecanica para salir y esta en buen estado. Tiene conexión con una línea de trenes.

Esta estación de la Línea B es la anterior a Federico Lacroze, si vamos desde Leandro N. Alem, y la que sigue si lo hacemos en sentido contrario.
Su ubicación marca el límite entre los barrios porteños de Chacarita y Villa Crespo.
Se nota su antigüedad, en especial en las rejas y el mármol con el nombre en ambos andenes, hecho con recuadritos, al igual que en otras estaciones, que tiene sus años, pues fue inaugurada en 1930.
Empero, si bien permanece este mármol, los nombres están en otras ubicaciones, con fondo rojo como en toda la Línea B, bien colocados para poder ser vistos desde los vagones por los pasajeros sentados.
Un detalle a tener en cuenta es que las líneas de subte de entonces no eran tan extensas como las que vinieron luego ni estaban interconectadas y la línea B llegaba desde Federico Lacroze hasta la actual estación Callao.
Al salir accedemos a las avenidas Corrientes y Dorrego. Hay una salida sobre la primera de ellas, del lado par de Corrientes, que da al Parque Los Andes; desde esta vereda podemos acercarnos a la estación Parada Chacarita, del Ferrocarril General San Martín. A la mañana temprano llega mucha gente en el tren y se acerca a esta estación para llegar al centro, a su lugar de trabajo.
Hay varios lugares importantes cerca de esta estación, como las Comisarías 29 y 15 de las Policías Federal y Metropolitana respectivamente, la Caja de Ahorro y Seguro y la cancha del Club Atlético Atlanta, a los que sumamos establecimientos educativos de primeros niveles, la sede de Edenor en Guzmán 302 y un importante taller industrial del Gobierno de la Ciudad.
Hay decoraciones en los andenes, como un mural dedicado a dos niñas, Jimena Hernández y Nair Mostafá, y una adolescente, María Soledad Morales, que murieron en forma trágica, además de otras de Roberto Scafidi, José María Cáceres, Juan José Cambré y Federico Bacher, quien con su obra Bosque Subterráneo ambientó la estación, haciéndonos sentir más cerca de la naturaleza.
Hay un puesto de venta de diarios y revistas en el andén de ida a Leandro N. Alem, con buen material, bien ubicado ya que hay mayor tráfico en esa dirección.
No faltan los televisores LCD con la programación de Vía Subte ni carteles publicitarios, varios curvos, alumbrados desde adentro y puestos en el centro de las vías, para ser observados por quienes esperan, además de asientos para esperar.
Dorrego da más la sensación de ser una estación de paso. Hay varias confiterías cerca pero el ambiente de la zona es más «acelerado», ya que la avenida Corrientes no tiene cerca muchos negocios para detenerse y mirar, en especial en el sector de Parque Los Andes, con cruces de otras arterias y vehículos que pasan rápidamente. Por ejemplo, en la estación no hay, como en otras, un bar en mostrador, ya que quienes llegan desde el tren buscan viajar lo antes posible, pero quien sabe observar nunca se aburrirá en una estación de subte. Alberto Auné

La estación de «Dorrego», es una estación modesta, pero linda, lindante con la Plaza Dorrego, y con una conexión con la LInea San Martin (Estacion Chacarita), son dos mundos que confluyen, mitad Palermo, mitad desgano–
Los andenes son laterales, y lamentablemente no hay conexión entre si.
Cercano al cementerio de Chacarita, asi como a «el Mercado de Pulgas», o la Cancha de Atlanta esta estación tiene un poco de «arte» aunque dista mucho de ser como las de la Linea D.
En la estación hay cuatro murales de 1991. El andén norte está acaparado por la obra A 3 niñas argentinas inmoladas, Jimena Hernández, Nair Mostafá y María Soledad Morales de Mildred Burton, en tanto que al andén sur lo decoran murales de Roberto Scafidi, José María Cáceres (Canto de amor para América Latina) y Juan José Cambré (El duende está en cada movimiento de nuestras vidas). El resto de la estación, incluyendo andenes, escaleras y pasillos de accesos cuenta con una intervención llamada bosque subterráneo de Federico Bacher
Lo mejor para remarcar de esta parada es que te deja cerca de la pizzería Imperio.
Ademas de ser cercana a varias lineas de Colectivo.