Fun dive bar. Cheap wine. Food looked great but was warmed up in a toaster oven. Live music. A man sang tango while another man played. Powered by a generator outside the building and at one point the power went out and bar staff lit candles. Def will never forget.
Pete R.
Classificação do local: 5 Karlsruhe, Baden-Württemberg
Ist das jetzt ein Geheimtipp? Wer in Buenos Aires Tangoluft schnuppern will, sollte nicht nur in La Boca am Caminito suchen. Auch ein Ausflug nach Almagro kann sich lohnen. Dort wartet dieses Traditionslokal seit 1893 auf Gäste. Die vergangene Zeit sieht man den engen Räumlichkeiten durchaus an. An den Wänden hängen Fotos von unvergessenen Künstlern längst vergangener Epochen, darüber reihrum Regale, vollgestellt mit staubigen Weinflaschen. Die Tische wackelig, wenn es nicht anders geht, setzt man sich eben auf zwei Bierkästen. Wenn die Show beginnt, ist jedenfalls am Wochenende kaum ein Platz zu bekommen. Es singen sowohl junge Künstler mit eigenen Interpretationen der Tangoklassiker als auch alte Hasen, bei denen man das Knistern der Schallplatten wahrzunehmen vermeint. Erstaunlich, dass augenscheinlich nur wenige Touristen diesen Ort frequentierten. Die Shows kosten zudem keinen Eintritt. Ach ja, eine ordentliche Weinauswahl gibt es auch. Ebenso Kleinigkeiten zu Essen.
Romina P.
Classificação do local: 4 Buenos Aires, Argentina
Amo ir a este lugar. Siempre se puede disfrutar de grandes artistas cantando tangos(a la gorra) hasta altas horas de la noche. Es un excelente lugar para ir con amigos y tomar vino mientras escuchas unos buenos tangos. La única contra es que al ser un lugar tan chico se llena temprano, pero si está linda la noche tienen mesas afuera. Un lugar histórico del barrio de almagro en el cuál es imposible pasarla mal.
Alejandra C.
Classificação do local: 4 Buenos Aires, Argentina
AMO. La experiencia barrial histórica, la auténtica, la de acodarse en la barra con una ginebra o sentarse a cantar unos tangos con vaso de vino en una mano y la otra alzada en el aire. Acá la historia del tango está viva. Esto no es el típico show turístico, es TODO lo contrario. Almagro, barrio con tradición de tango, es anfitrión de esta joyita que ojalá perdure en el tiempo. Antiguamente se llamó La Casaquinta y luego Bar 12 de octubre, y está en esa esquina desde 1893, cuando el barrio todavía era un campo. Un espacio chiquito, con apenas algunas mesas, con estilo de bodegón, pulpería y despacho de bebidas, que es lo que fue. Está lleno de botellas polvorientas, con poca luz y decoración que parece estancada en aquellos tiempos. Una oferta escasa de comida pero que no falla(picadas, minutas, etc.), y lo mejor: cantantes de tango. Sí, en Lo de Roberto se viene a beber y a cantar/escuchar unos tangos. A veces en el escenario de 1×1(literal) hay jóvenes que hacen sus interpretaciones personales de canciones tangueriles, pero siempre hay algún tanguero de antaño con esas voces que parecen resquebrajadas ya de tanta calle, y es casi como que estuvieras escuchando a las grandes voces del pasado. Claro, porque este fue uno de los lugares favoritos del maestro Osvaldo Pugliese, no está de más decirlo. No se cobra entrada ni hay reservas. Los shows son a la gorra. Ideal para hacer vereda si vas tarde(siempre está lleno y hasta bien entrada la noche), o para ir antes de mover para otro lado, picar algo, tomar y dejarte llevar en un viaje musical al pasado.
Agustín K.
Classificação do local: 4 Santiago de Chile, Chile
Está bueno ir siempre, cualquier día de semana y también en ese momento que algún extranjero(de esos europeos que vienen en ojotas y con la mochila la hombro) que apenas llegado a Buenos Aires te dice«¡Quiero conocer tango!». Y es el mejor momento para mostrarles tango de barrio y no el tango de paquete turístico. El servicio es bastante malo, la comida no muy buena y un poco caro. Pero todo eso se compensa con el ambiente y los cantantes que van a tocar ahí. Es por eso que el lugar se llena. Para ocupar una mesa hay que ir temprano auque la experiencia es la misma, tanto sentado como de dorapa, la gracia es escuchar ese tango cantado con carraspeante voz(condición sine qua non) mientras te tomás un vino. Horario de cierre: tarde, a la madrugada.
Andre A.
Classificação do local: 5 Pinheiros, São Paulo - SP
Lugar pitoresco incrivelmente encantador! Parece que vocês está em buenos Aires do início do século xx sem ser fake! O bar tem história e alma! O atendimento é feito pela Mabel que dá conta de todo no bar que representa com dignidade os redutos boêmios de buenos aires! Cerveja barata mas não gelada como os brasileira gostam de tomar foram recompensadas pelos atendimento gentil e com a abertura para diversos músicos tocarem e dançarem seus tangos e milongas a vontade! Incrível isto! Assistimos ao verdadeiro tango sem ser show para turistas envolto por este lugar e sua magia! Uma dica foi a tábua de frios deliciosa que postei na foto! Bom e não tão caro
Luc B.
Classificação do local: 4 Buenos Aires, Argentina
Una de las cosas maravillosas que tiene Río de Janeiro es que si sabés moverte, podés encontrarte un barcito cualquiera en donde tres negros increíbles toquen la samba de tu vida y te lamentes todo el recital no haber nacido unos kilometros más al norte. Sin embargo, no es para desesperar, la alegría no es sólo brasilera. El boliche de Roberto es ese bar por el que no das dos mangos, donde la gente se agolpa y tres o cuatro pibes de barrio sentados en unos cajones de cerveza dados vueltas se cantan todo a garganta pelada, con una viola criolla y un bandoneón de los decentes, unos tangazos hermosos y sentidos. Así el lugar es mágico, una especie de salón muy chico y antiguo que vende unas pizzas y unas cervezas a precios populares, unos tintos para compartir o una ginebra para quebrar. En verano la cosa es salada porque los turistas –que no so tontos– lo descubrieron y van en patota y el lugar que es muy chico queda a rabiar. El show, de más está decir, no cobra entrada ni plus, es a la gorra para que dejes orgulloso lo que te parece.
Mariana K.
Classificação do local: 4 Buenos Aires, Argentina
El boliche de Roberto o «Lo de Roberto» es un magnífico lugar como para empaparte de «porteñitud». En una casona vieja de techos altos devenida en bar con estilo de viejo almacén te vas a encontrar con shows de tango geniales. En esta pequeña cantina cuando avanza la noche, especialmente el fin de semana, el lugar se pone que explota. No es extraño ver mucha gente en la vereda escuchando por la ventana(siempre abierta en verano) la música que sale de las gargantas de los artistas que cantan una milonguita o vals marcando el 2×4. En lo de Roberto no se reserva y no te cobran entrada, los shows son siempre a la gorra. Pero, si querés ir y pasar parte de la noche te recomiendo que vayas temprano como para poder agarrar una mesa. Así te asegurás una buena ubicación para escuchar a los cantantes que suelen destacarse en el mínimo escenario donde apenas entran dos cajones de cerveza que sirven como asiento. Acá no hay micrófono sino que todo es a viva voz. La comida es simple hay picadas, pizza y empanadas caseras dispuestas a ser acompañadas con cerveza, aunque el vinito y el vermouth no puede faltar cuando hablamos de «cosa de guapos». Para los valientes siempre hay ginebra en la barra. Es un buen lugar como para ir con amigos y relajarte. También te vas a encontrar con muchos turistas que caen atraídos por los sonidos tangueros que salen del lugar. La última vez que fui el bandoneonista que tocaba era igual al personaje de Jack Sparrow de Piratas del Caribe y se la pasaba mirando a la nada y diciendo«veo el tango pasar» muy bizarro!!- y de paso tocaba como los dioses!